19 de mayo de 2020
Sociedades médicas, organizaciones de enfermería y Médicos Sin Fronteras publican una carta abierta dirigida al Ministerio de Sanidad y a las Comunidades Autónomas donde transmiten su enorme preocupación por aspectos que,ante un escenario de desescalada, deben resolverse y atenderse sin demora.
España es el país que reporta una mayor incidencia de profesionales sanitarios y socio sanitarios contagiados en Europa por la COVID-19. A fecha de 15 de mayo, hay 50.455 sanitarios infectados entre trabajadores en hospitales y centros de Atención Primaria, lo que supone una tasa del 21% del total de casos confirmados. Se estima que al menos hay 76 fallecidos entre trabajadores en hospitales y centros de Atención Primaria.
Las instituciones firmantes alertan de que los contagios entre sanitarios continuarán si sigue habiendo escasez de equipos de protección adecuados en número y en calidad, en particular para el personal sanitario en centros de Atención Primaria y en las residencias de mayores. Todavía hoy, el principal foco de transmisión y mortalidad parece estar localizado en las residencias, centros en los que equipos móviles de Médicos Sin Fronteras (MSF), han evidenciado carencias tras dar a apoyo a más de 400 residencias.
Dado que la Atención Primaria de Salud es la encargada de identificar los centros sociales en su zona básica de salud (entre los que se incluyen las residencias de mayores, de menores, de personas con discapacidad, etc.), la vigilancia de estos centros y el apoyo sanitario, así como las visitas domiciliarias, las organizaciones y sociedades médicas firmantes consideran imprescindible que se les dote de los medios efectivos y proporcionales a las necesidades de los residentes.
Con el mismo objetivo, emplazan a las autoridades sanitarias y de servicios sociales a reforzar los recursos humanos en hospitales, centros de salud, centros socio sanitarios y residencias. Las instituciones advierten que el ratio de personal por número de residentes continúa siendo insuficiente, y esta deficiencia está entorpeciendo contra la Covid-19, como la desinfección y adaptación de trabajadores y residentes a los circuitos y zonificación o la utilización adecuada de equipos de protección.