11 de octubre de 2019
El próximo día 12 de octubre se celebra, en todo el mundo, el Día Mundial de los Cuidados Paliativos. El lema de la convocatoria de este año, "mi cuidado, mi derecho", pretende hacer una llamada a la acción a todos aquellos que se ven afectados por una situación de enfermedad avanzada, ya sea como paciente o como cuidador, para forzar una priorización de la atención a las necesidades paliativas. Todo ello, "en tanto derecho humano básico, dentro del sistema de cobertura sanitaria universal, asegurando su adecuada integración a todos los niveles asistenciales y, especialmente, en el entorno comunitario", asegura Francisco Javier Resa, miembro del Grupo de trabajo de Cuidados Paliativos de SEMERGEN.
Existe una fuerte evidencia que demuestra que la mayor parte de las personas prefieren recibir cuidados hasta el final de su vida en su domicilio, si las circunstancias permiten esa opción. Y, en este sentido, "sabemos que si reciben cuidados adecuados al final de la vida en casa, tienen más del doble de posibilidades de mantenerse en su entorno hasta el fallecimiento", asegura el Dr. Resa.
"Por otra parte, la atención a las necesidades paliativas en el domicilio ayuda a reducir la carga sintomática experimentada por los pacientes, sin afectar negativamente al posterior duelo de la familia, siempre que se facilite una implicación activa de los cuidadores". Y para ello, es esencial cumplir ciertas condiciones, en especial que se transmita seguridad por parte del equipo, además de que se genere un clima de confianza mutua y un diálogo respetuoso entre profesionales y unidad paciente-familia que facilite su participación en la toma de decisiones.
A este respecto, desde SEMERGEN quieren insistir en que, en estas circunstancias, los pacientes que desean mantenerse en su casa hasta el final, deberían poder tener la opción de recibir allí cuidados paliativos adecuados que le permitieran vivir sus últimos días con dignidad, confort y paz. "Y no cabe duda de que, por accesibilidad, continuidad, transversalidad y longitudinalidad propias de nuestra disciplina, la Medicina Familiar y Comunitaria resulta especialmente idónea para la atención integral en el domicilio a enfermos y familiares con necesidades paliativas".
En esta línea, durante la celebración del 41º Congreso Nacional que se celebrará en Gijón, del 16 al 19 de octubre, se va a llevar a cabo una mesa de debate en la que se pondrá el foco de atención en la nueva ley de cuidados paliativos. Bajo el título "La nueva ley de cuidados paliativos a debate, ¿que? aporta de nuevo?", se especificará lo que debe conocer un profesional sanitario y un médico de Atención Primaria sobre dicha regulación, se indicarán los motivos de porque el Médico de Familia debe estar al tanto, así como qué debe hacer y qué no, según la legislación vigente, además de indicar los principios de bioética y llevar a cabo un análisis práctico de los casos mediáticos y sugeridos.
"Realizar una atención de cuidados paliativos adecuada entronca con la esencia humanística de nuestra labor diaria y es, además, uno de los quehaceres que más sentido da a la misma, un compromiso ético hacia nuestros pacientes y un enorme privilegio al que no debemos ni queremos renunciar", concluye el Dr. Resa. "Para que nuestra función sea sostenible y satisfactoria en este campo, no obstante, se hace necesaria una apuesta decidida por dotar a la Atención Primaria de las condiciones mínimas que nos permitan cumplir con nuestro deber de forma efectiva", continúa diciendo.